La UPC, uno de los agentes relevantes para el desarrollo de la Industria 4.0

Fomentando la fabricación aditiva

También la fabricación aditiva concentra el interés de la Industria 4.0, un ámbito en el que la UPC atesora un currículum consolidado a partir de núcleos de actividad tales como el CIM UPC. El centro, que comenzó proponiendo tecnología para la empresa hace más de 25 años, proporciona ahora de la mano de la empresa japonesa Ricoh servicios integrales y tecnología puntera en el Ricoh Additive Manufacturing Centre. "El centro ─explica el director general del CIM UPC, Felip Fenollosapresenta las herramientas que las empresas deben incorporar si quieren transformar su modelo de negocio a las nuevas dinámicas de la Industria 4.0 mediante la impresión 3D y la fabricación digital en general". Se trata del primer centro de la compañía Ricoh en el sur de Europa con capacidad para implementar servicios integrales de fabricación avanzada y prototipado integral, con un enfoque especial en el desarrollo de nuevos materiales.

Un 63 % de los alumnos que asisten hoy a una clase de primaria acabarán ocupando un puesto de trabajo que ahora mismo no existe. Este desconcertante augurio laboral tiene mucho que ver con la que ya se conoce como la cuarta revolución industrial, la llamada Industria 4.0, un proceso transformador de la industria que se basa en la combinación de métodos de producción y tecnologías de la información avanzadas para conseguir que el proceso de fabricación sea adaptativo y flexible.

21/12/2018

La Industria 4.0 ―identificada en Cataluña y en la mayor parte de nuestro entorno por los gobiernos como un sector emergente―, interconectará de un modo distinto a personas, máquinas y sistemas. Aparte de consideraciones que exigen la intervención activa de los poderes políticos para que esta revolución no implique un descalabro social ―promoviendo capacitación, formación y nuevos perfiles profesionales―, los países y las regiones se están poniendo las pilas para cimentar esta transformación, que es también sinónimo de futuro y de progreso.

La Universitat Politècnica de Catalunya (UPC) es uno de los agentes relevantes para el desarrollo de la Industria 4.0 en Cataluña, especialmente por la necesidad de valorizar y capitalizar el conocimiento ya existente y acelerar lo que aún está por crear. Lo es porque una parte relevante de su actividad académica puede vincularse directamente o parcialmente a la Industria 4.0. De hecho, una de las premisas de trabajo en la propia UPC está siendo la identificación de aquellas líneas de investigación y transferencia del conocimiento, así como en la oferta de estudios, que puedan aportar conocimiento y talento a las bases tecnológicas de este cambio productivo que es la Industria 4.0.

En total son un centenar los grupos de investigación de la UPC que están relacionados con las líneas maestras de la Industria 4.0, y una cincuentena de ellos participan directamente en el desarrollo de proyectos. Por otra parte, unos 40 másters entre oficiales y propios de la UPC abarcan todas las tecnologías involucradas en este ámbito. En este escenario, "la UPC debe ser un eje científico y tecnológico de este nuevo paradigma de producción industrial en la era digital", explica el profesor Luis Romeral, codirector del Motion Control and Industrial Applications, el Research Center MCIA UPC, un centro especializado en mantenimiento predictivo para el sector industrial, tecnología basada en la internet industrial de las cosas y big data analytics dirigida a prever posibles fallos y defectos en el funcionamiento de la maquinaria industrial y evitar paradas de emergencia y tiempo muertos ganando eficiencia y productividad.

La Industria 4.0 en Cataluña articula una serie de tecnologías principales: manufactura avanzada, con la robótica autónoma y la colaborativa y la fabricación aditiva como ejes; los sistemas ciberfísicos, con conexiones de sensores inteligentes, nuevos modelos digitales, la inteligencia artificial, las interfaces avanzadas y la realidad aumentada; y, finalmente, la transformación digital que conlleva el big data y la analítica, la ciberseguridad y la internet de las cosas.

En este último ámbito se enmarca, por ejemplo, el proyecto Data-Driven Steel 4.0 desarrollado por CELSA Group, en el que ha participado el grupo MCIA Research Center y que ha tenido la colaboración de IThinkUPC. El objetivo ha sido desarrollar un sistema de captación y análisis de datos de producción de las plantas siderúrgicas de CELSA Group mediante el despliegue de una plataforma industrial Internet of Things (IIoT).

CELSA es actualmente uno de los principales productores europeos de productos largos de acero, y con este proyecto está implantando técnicas de monitorización inteligente de sus procesos industriales mediante el desarrollo de analítica avanzada industrial soportada por una plataforma IIoT. El proyecto se desarrolla sobre cuatro plantas de producción en Barcelona y Santander, y su objetivo último es la mejora de la productividad y la competitividad de la multinacional.

Obviamente, no solo las grandes multinacionales deben ser epicentros de la transformación industrial. El reto también es encontrar soluciones a medida de las pequeñas y medianas empresas para que puedan iniciar sus propios itinerarios hacia la Industria 4.0. Es en este sentido que la UPC desarrolla acciones de apoyo a partir de acuerdos como el recientemente alcanzado con PIMEC, que trata de articular vías de colaboración con este tipo de empresas.

En otra escala se sitúa la iniciativa TEchnology TRAnsfer via Multinational Application eXperimentos (TETRAMAX), un proyecto europeo en el que participa el grupo de investigación Data Management Group (DAMA UPC) y que lidera la RWTH Aachen University. TETRAMAX es un consorcio para impulsar la transferencia de tecnología en torno a la internet de las cosas, que implica a 22 socios de 28 países de la Unión Europea a partir de la iniciativa Smart Anything Everywhere (SAE).

Con un presupuesto de siete millones de euros para cuatro años, TETRAMAX estimula, organiza y cofinancia proyectos bilaterales transfronterizos que propician transferencia de tecnología y que involucran a toda la cadena de valor. Además de apoyar la creación de nuevas empresas, conecta pymes, entidades financiadoras y universidades para implementar tecnologías a un muy bajo riesgo para las empresas.