Declaración de la UPC en apoyo a las mujeres iranianas

El Consejo de Dirección de la UPC hace la siguiente declaración de apoyo a las mujeres iranianas y de rechazo a la represión.

25/10/2022

El pasado 13 de septiembre, la joven kurda Jina Amini, de veintidós años, fue detenida por la policía de la moralidad de la República Islámica de Irán con el pretexto de que llevaba incorrectamente el velo. Sufrió una agresión física por parte de los agentes de policía, que puede calificarse de brutalidad policial e, incluso, de tortura. Jina Amini murió en el hospital el 16 de septiembre a consecuencia de un infarto y un coma.

Tras el asesinato de Jina Amini, estallaron protestas a escala nacional en más de 120 ciudades de Irán, en las que participaron cientos de miles de ciudadanos iraníes. Estas protestas fueron iniciadas por mujeres que exigían la rendición de cuentas por la muerte de Jina Amini y pedían que se pusiera fin a la violencia y la discriminación contra las mujeres en Irán, en particular, por la obligatoriedad del uso del velo.

Los movimientos de protesta se extienden con fuerza entre los estudiantes y las estudiantes en numerosas universidades de todo el país, en particular en la Universidad Tecnológica Sharif de Teherán, donde boicotean las clases y se manifiestan contra la represión. La respuesta de las fuerzas de seguridad iraníes ha sido violenta y descontrolada, provocando muertes y heridos.

Además, las autoridades iraníes están bloqueando las conexiones a internet, con lo que intentan evitar la transmisión y difusión de noticias e imágenes de las protestas, impidiendo a las organizaciones internacionales y locales documentar las violaciones de los derechos humanos.

Desde 1983, el Gobierno iraní va desarrollando legislación sobre la forma en que deben mostrarse en público las mujeres, lo que se convierte en un instrumento para la represión, ya que las priva de libertades y derechos. A menudo, las mujeres son sitiadas, encarceladas, torturadas, azotadas e incluso asesinadas por desafiar estas normas represivas.

Desde el mandato del presidente Ebrahim Raisi, en 2021, Irán ha impulsado legislación que endurece la represión contra las mujeres, en particular a través de una nueva ley aprobada en 2021 por la que se restringe drásticamente el acceso de las mujeres a los derechos de salud sexual y reproductiva.

Más de 40 defensores y defensoras de los derechos humanos han sido detenidos desde el 18 de septiembre de 2022, y las defensoras de los derechos humanos han sido objeto de ataques especiales y violentos como parte de estas detenciones, agresiones y redadas de las fuerzas iraníes. En la línea de la represión y la vulneración de los derechos humanos, el Tribunal Revolucionario de Urmia ha condenado a muerte a las defensoras de los derechos de las personas LGBTQI Zahra Sedighi Hamedani, de 31 años, y Elham Chubdar, de 24 años, acusadas de «corrupción en la Tierra mediante la promoción de la homosexualidad».

En Cataluña han sido diversas las expresiones de rechazo de diferentes instituciones, aprobando declaraciones en apoyo de las mujeres iraníes y de rechazo a la represión.

También el Parlamento Europeo aprobó, el jueves 6 de octubre, una resolución contra la situación en Irán.

Por todo ello, el Consejo de Dirección de la Universitat Politècnica de Catalunya - BarcelonaTech (UPC) quiere expresar:

1. La condena al asesinato de la joven kurda Jina Amini a manos de la policía de la moral de Irán y expresar el pésame a la familia y amigos y familias de todas las personas asesinadas durante las recientes protestas.

2. La solidaridad con las jóvenes iraníes que lideran o participan en las protestas, a pesar de las dificultades y repercusiones personales a las que se enfrentan. Gracias a ellas se articula el movimiento de protesta pacífico en todo el país contra el asesinato de Jina Amini, la opresión sistemática y creciente de las mujeres y las violaciones graves y masivas de los derechos humanos y libertades fundamentales.

3. La condena enérgica al uso generalizado y desproporcionado de la fuerza por parte de las fuerzas de seguridad iraníes contra manifestantes pacíficos, así como la condena a cualquier forma de tortura. La liberación inmediata y la retirada de todos los cargos en contra de las personas encarceladas por las protestas son irrenunciables.

4. Nuestro apoyo a las aspiraciones del pueblo iraní, que quiere vivir en un país libre, estable, integrador y democrático que respete los derechos humanos y las libertades fundamentales.

5. La necesidad de una investigación rápida, imparcial y eficaz de las muertes de Jina Amini y de todas las personas que se manifiestan, que incluya el enjuiciamiento de los responsables.

6. Nuestra condena a cualquier legislación que establezca normas que atenten contra la libertad de las mujeres a vestir y vivir con libertad.